Epitome de Awakusu Akane

Episodio 6: Awakusu Akane

Ésta es una historia del futuro. 

Una historia de retorcido futuro. 

En la primavera del primer año de Awakusu Akane en la escuela secundaria. 

Unos días habían pasado desde su entrada en la academia Raira, pero justo cuando pensaba que se acostumbraba a su nueva escuela, eso llego.

Ella salió y se calentó con la luz del sol primaveral, obligándola  refugiarse bajo un árbol, cuando de repente una sombra apareció frente a ella, y comprendió que una chica estaba de pie frente a ella. 

“Tu familia es el Awakusu-kai ¿No?”

Akane se sobresaltó ante el tono algo provocativo de la chica. 

El abuelo de Awakusu Akane era la cabeza de una organización criminal conocida como el Awakusu-kai. 

Su hijo Awakusu Mikiya, era el padre de Akane, era la joven cabeza, haciéndolo un negocio familiar de dos generaciones. 

Algunos asuntos se habían susurrado sobre su herencia, y aunque habían preocupado a Akane en un momento dado, mientras sus días escolares pasaban, había superado esas preocupaciones, y ahora pudo vivir sus días sin preocuparse sobre tales cosas. Sin embargo, esta era primera vez que alguien la había confrontado sobre eso. 

“No pude confrontarte hasta ahora, pero hoy puedo, así que escúchame.”

 “…”

En lugar de sentirse ofendida o triste, parecía que la curiosidad de Akane sobre la chica había vencido, por lo que sólo inclinó su cabeza y miró fijamente a la cara de la chica. 

La chica estaba mirándola, y no lucia lejos. 

Un minuto. 

Dos minutos. 

Cuando tres minutos pasaron, ella lloriqueó, y, vacilando, dijo.

“¡Q-que! ¿¡Por qué estas mirándome!?¡No me asustaré de ti!”

Akane no tenía intención de mirarla o algo así. 

Pero aparentemente estar inexpresiva puso más presión, sin tener esa intención .

Akane se confundió aún más cuando la cara de la chica empezó a tambalearse y comenzó a llorar.

Ella es como una niña. 

Ese era el pensamiento de Akane. 

En su propia niñez había sido rápida para llorar, se había asustado fácilmente y era emocional, pero ahora que estaba en su primer año de escuela secundaria naturalmente había desarrollado un poco de calma.

Probablemente era el producto de aprender bojutsu en el Gimnasio Rakuei al que asistía ahora. 

La verdad, entre los de su edad, uno podría considerar a Akane un nivel por encima de ellos.

Y desde su perspectiva, su categorización de esa chica, que había escogido una lucha sin razón y había procedido a llorar sin ninguna razón, era de hecho ‘Una linda niña’.

Ya que era su primera reunión, Akane iba a pedir su nombre -pero la chica apuntó furiosamente a ella y lloró.

“Cualquier cosa que vayas a decir ¡No te escucharé!”

Y al irse la chica. 

Los otros estudiantes estaban igualmente confundidos, pero ninguno reaccionó extrañamente a Akane; quizás ellos no conocían bien al Awakusu-kai, o estaban pretendiendo no saber porque eran temerosos o estaban siendo sensibles hacia Akane. 

Akane eventualmente regreso en sí, y se preguntó

“¿Que en la tierra… fue eso?”

Unos días después. 

Cuando Akane pasó por el almacén del gimnasio después de la escuela, vio una escena de intimidación. 

“Eh, siempre metiéndote en otros asuntos, actuando toda alta y poderosa, es molesto ¿Comprendes?”

Un grupo de estudiantes de estilo gyaru estaban acorralando a una chica detrás del almacén del gimnasio. 

La víctima era una chica con su pelo negro atado atrás - la misma chica que se había acercado antes repentinamente a Akane hace unos días. 

“¿N-no es mi asunto? ¡Ustedes se saltaron la escuela, eso está mal!”

Su valentía se escuchaba en sus palabras, pero ya parecía cerca de las lágrimas. 

“¿Quién piensas que eres?”

Las gyaru tiraron pelotas de softball hacia el cuerpo de la chica.

(Nota: las pelotas de softball tienen la misma forma que las de beisbol, pero son mucho más grandes y pesadas.)

“Ugu.”

La chica arqueo su cuerpo por el dolor. 

“De-detenganse.”

“¿Huh? ¿Por qué? Nosotras solo estamos ‘entrenando softball’.

“Aunque no estamos en el equipo de softball. Ha.”

A medida que decían eso, las otras chicas comenzaron también a tirarle pelotas de softball.

Naturalmente, incapaz de ignorar eso, Akane habló. 

“¿Qué están haciendo?”

Dijo eso sin algún miedo en su voz. 

No podía pretender que no vio nada. 

Este único rasgo había permanecido inalterado desde su niñez. 

Claro en sus días de primaria su voz estaría agitada por su esfuerzo para mostrar todo su valor, pero ahora había entrenado su mente y cuerpo por lo que pudo hablar firmemente. 

“… ¿Quién diablos eres? No es tu asunto.

Desde el punto de vista de las gyaru, una chica aparentemente tímida se había detenido para interferir con ellas.

Viendo como estaban intimidando a la chica con la coleta por ser entrometida, la intervención de Akane era probablemente igual de mal recibida. 

Sin avisar, una de ellas le tiró una pelota de softball.

“… “

Akane agarro la pelota con sus manos desnudas. 

“… “

Las chicas quedaron con la boca abierta por un momento, pero probablemente pensando que dejar las cosas como estaban las haría lucir como perdedoras, empezaron a tirar pelotas de softball esparcidas por el suelo. 

Pero Akane, con su expresión inmutable, trató impecablemente con cada pelota, agarrándolas o esquivándolas, o incluso caminando sobre las pelotas. 

Para ella, un ejercicio como ese era una rutina diaria en su dojo.

(Nota: así que ese dojo desarrolla súper humanos, copiado.)

Allí le lanzaban pelotas difíciles desde direcciones múltiples para afilar su habilidad de seguir objetos en movimiento. Comparado con las pelotas difíciles tiradas a alta velocidad por su mentora, esas pelotas de softball era lentas ligeramente más grandes y no daban miedo en absoluto. 

“… ¡Tch! ¡Nos vamos! ¡Qué pérdida de tiempo!”

“¡Uf ~! ¡Ustedes los entrometidos pueden llevarse bien, calva!”

Después de escupir ese insulto completamente incongruente a Akane ‘calva’, se fueron. 

Akane miró sus espaldas fríamente a medida que se iban, antes de retroceder hacia la chica con la coleta y extender su mano. 

“… ¿Estás bien?”

“G-gracias…”

Le agradeció a Akane y la vio de frente, y repentinamente comprendió quién era. 

Entonces miro a Akane, e intentó alejar su mano. 

“Yo no te pedí ay… ayu…?”

Ella desvió su mano de Akane para alejarla, pero Akane agarró esa mano firmemente. 

“D-déjame ir ¡No necesito ayuda del Awakusu-kai!”

“Dime.”

Dijo Akane, tranquila pero intensa. 

La llave para entender a un oponente que no era receptivo con uno, era averiguar la meta de esa persona. 

Akane, recordando cómo su instructora había dicho eso, había decidido empezar preguntando eso. 

La verdad, después de decir eso su instructora dijo, ‘Una vez que sepas su meta, puedes crear una apertura o puedes lanzar un contra ataque a tu oponente. Después de eso se volverá una ofensiva unilateral.’ Pero Akane escogió no recordar esa parte. 

“¿Huh…? decirte… ¿Decirte qué?”

“Qué…  tenía que haberte dado la espalda ¿entonces…?”

“¡…!”

“¿Debí haberte abandonado? Viendo como intimidaban a otra persona, debo yo… ¿Pretender que no vi nada?”

Pregunto Akane preocupadamente a la chica con la cola de caballo- 

Y después de unos segundos, empezó a agitar su cabeza, lágrimas brotaban de sus ojos. 

“N- no lo sé, cómo habría… como habría… de saberlo…”

Unos minutos después. 

Akane estaba sentada  en el césped al lado del cobertizo, confortando a la chica sollozando. 

Resultaba que - al parecer, la chica había escuchado rumores de Akane de una compañera de clases que había asistido a la misma escuela de Akane. 

“P-pero… Ella dijo, ‘la familia de Awakusu Akane-chan es el Awakusu-kai, por lo que nuestros padres nos dijeron que no podríamos oponernos a ella, por lo que no teníamos ninguna opción’… Y ella dijo que sólo podía aceptar todo lo que dijeras, también…”

Después de escuchar completamente la historia, Akane suspiró profundamente. 

Mientras le hacía recordar la sensación de pérdida que había tenido en la escuela primaria, ella no mostro desagrado hacia la chica ante ella. 

De hecho, simplemente estaba un poco contenta. 

Aun cuando era una equivocación, al final la chica había hablado de sus verdaderos sentimientos frente a Akane, sin tener en cuenta su familia. 

Por eso es que Akane decidió hablar de el. 

De su pasado. 

Volviendo atrás, cuando detuvo ese primer caso de intimidación-a cuando descubrió el verdadero trabajo de su familia, e incluso sobre cómo después, su relación con su familia había crecido en el último tiempo. 

La chica con la coleta escucho tranquilamente, su temblor demostró que había sufrido una gran sorpresa. 

Y al momento en que Akane terminó, empezó a llorar de nuevo. 

Esto luce interminable. 

Akane pensó eso al prestarle apresuradamente su pañuelo. 

La chica, sollozando, se disculpó con Akane tan profusamente que parecía podría arrodillarse en cualquier momento. 

“Ugu… Higu… L-lo… siento… estuve mal… comprendí mal… a ti… y te herí…”

Después de otros pocos minutos de calmarla. 

La chica, que finalmente se había tranquilizado, ahora se disculpaba con una expresión malhumorada. 

“Lo siento mucho… tu… debes odiarme. Te ataqué por equivocación, y cuando me ayudaste te rechace de nuevo…”

“No debes culparte.”

Akane intento animarla. Pero la chica parecía mirar a la distancia, y susurró suavemente.

“Quiero ser más fuerte… Pero no sé siquiera por dónde empezar…”

Después de pensarlo, Akane sacó su smartphone de su bolso, y le mostró a la chica la galería de proyectos del sitio móvil de una revista. 

“Ésta es una de las personas que respeto.”

‘¡Kinomiya Kazane Desafío las maravillas mundiales!’, decía esas palabras en la pantalla. Parecía que esa persona investigó la leyendas urbanas por el mundo: visitando castillos viejos dónde se decía fantasmas aparecían, yendo todo el camino a una isla al norte de Alemania en busca de vampiros, entonces a Nueva York siguiendo una banda rumoreados inmortales, entrevistando a ilegales ciudadanos de la construcción abandonada Etsusa Bridge, y esencialmente involucrándose activamente en una gama de cosas que lucían aterradoras. 

“Esta es Kinomiya Kazane tuvo una entrevista sorpresa por una hora… con las aterradoras personas del Awakusu-kai. No supe que pasaba entonces… Cuándo le pregunté si estaba asustada… ¿Qué crees que dijo?”

“… No sé.”

“Ella dijo, ‘da miedo, pero dejar sin conocimiento de esto a las personas da más miedo. Está bien si sabes de algo peligroso y te pones en guardia, pero continuar temiendo a algo mientras no sabes nada, es lo más terrorífico de todo.’ Pensé que lo que dijo tenía sentido, entonces…”

A medida que decía eso, vieron un grupo de siete, chicos y chicas, que caminaban hacia ellas. 

Viéndolo más de cerca, eran las chicas que habían tirado las pelotas de softball antes, y habían llevado a unos chicos que parecían delincuentes. 

“¿Eh, son ellas? ¿Las que dijiste no conocen su lugar?”

Era un chico con el cabello castaño y un bate en su mano, mascando chicle ruidosamente. 

Diferente a cuando era conocida como academia Raijin, la academia Raira tenía en los recientes años una reputación por ser escuela de niños ricos. Como tal, ni siquiera los delincuentes de la escuela eran los mismos intimidando. 

A este chiste de delincuente, una de las gyaru le dijo.

“Sí, Satoshi ~. Estas chicas no conocen su lugar ¿Asústalas un poco por nosotras?”

El grupo sonrió malévolamente, mientras miraban hacia ellas. 

Probablemente ellos pensaron agruparse y pegarles. 

Ellas eran excedidas en número abrumadoramente, pero por dentro, Akane estaba extrañamente calmada. 

No da miedo. 

Si comparas esto a lo de antes, no es nada.

Los recuerdos de ser secuestrada y forzada a dentro de un camión regresaron a ella. 

Cuando el hombre con traje de camarero la había salvado.  

Estas personas… comparadas con la fuerza de Shizuo-san, no son nada. 

Si las personas hubieran escuchado sus pensamientos internos, ellos probablemente llorarían al ser comparadas con el muñeco de pelea automático de Ikebukuro, era demasiado brutal, pero eso no significaba nada para Akane. 

Ignorantes de la comparación mental que se hacía sobre ellos, los delincuentes sonrieron vilmente. 

“¡Hah! Lo siento si te orinas, pero tendré que mostrarte lo que pasa a las personas que hablan de mi novia, personalmente con este bate…”

En el tiempo que tomó al chico balancear el bate hacia ellas, Akane ya se estaba moviendo. 

Agarrando la parte gruesa del bate y girándolo, debido al efecto de palanca, una gran fuerza se ejerció en la mano del chico sosteniendo la parte delgada. 

Haciendo eso, Akane halo su cuerpo mientras robaba el bate hacia ella con su brazo, y tirando del final del bate, eficazmente tomo el bate. 

“¿¡Ah!?¿¡Hah!?”

La velocidad causo que el chico se sorprendiera, y cayera sentado. 

Siguiendo eso Akane agarro el bate en una posición de bateo, y lo apunto hacia la cara del chico, como si fuera a golpearlo con el bate. 

“¿¡Uboahh!?”

El chico gritó, lágrimas brotaban de sus ojos. 

Akane, habiendo detenido el bate antes de que golpeara su nariz, sonrió dulcemente, y dijo a los estudiantes ante ella, 

“Ustedes no deben usar bates para golpear a las personas. Es malo ¿Lo saben?”

Al ver la sonrisa angelical de Akane, los siete estudiantes se pusieron blancos y huyeron. 

La chica con la coleta, la miro aturdida, y dijo.

“Estupendo… ¿Cómo hiciste eso?”

Akane se giró hacia la muchacha. 

“¿Quieres saber?”

“… Sí.”

“Entonces te enseñaré. También puedo presentarte a mi maestra.”

“¿¡Enserio!? ¡Gracias!”

La chica, recuperando su sonrisa finalmente, extendió su mano hacia Akane, y limpiando sus lágrimas, sonrió. 

“Soy… Kuzuhara Toka. Por favor cuida de mí.”

En días por venir, ellas crecerían como buenas amigas a pesar de sus trasfondos familiares, y esa relación causaría que se involucraran en numerosos problemas -pero ésa es otra historia. 

Y no importa cuántas veces e embrollaron en caos, su amistad se fortalecería-Toka superaría su timidez después, y se le temería junto a Akane como ‘The Demon Staff-Users, STICK WITCHES -pero ésa es otra historia. 

En una nota aparte, cuando los siete chicos y chicas estaban acechando a Akane para una oportunidad de tomar venganza: 

“¿Oi, niños vengan? Vengan con nosotros y hablemos sobre lo que iban a hacerle a esa chica ¿Huh?”

Ellos fueron llevados lejos por el Awakusu-kai, y retirados de la escuela en los próximos días - 

Pero ésa también es otra historia. 

Ésta es una historia torcida. 

Una historia de un retorcido futuro.